Por eso, en esta guía conocerás las características, consejos de uso y diferentes tipos de sistemas de ventilación.
Las preocupaciones se acabaron, ¡crea tu propio oasis! Lo puedes hacer con un enfriador de ambientes, aire acondicionado o un ventilador. Aquí podrás aprender cuál es el indicado para que puedas disfrutar los días calurosos en la comodidad de tu hogar.
Antes de escoger, ten en cuenta la zona geográfica y climática dónde vives, ya que eso influye en el tipo de sistema de ventilación que necesitarás.
- Si vives en un clima seco y caluroso, es mejor un aire acondicionado.
- En los lugares donde no corre viento, podría ser muy útil ventilador.
- En las zonas como la playa, donde el calor no es tan fuerte, podría ser mejor un enfriador.
- Las dimensiones de la casa: influye en el tamaño y cantidad de aparatos a instalar.
- La orientación de las paredes: las que dan hacia el norte son más calurosas.
- Cuenta con el aislamiento de la casa y sus ventanas, porque influye en cómo se mantendrá el aire frío dentro de la vivienda.
- La cantidad de personas que circulan influyen en el aumento de la temperatura.
Nadie más que tú, conoce los lugares donde más hace calor. Pero te dejamos estas sugerencias:
- Para habitaciones cerradas, pequeñas, escritorios y dormitorios, elige un ventilador de mesa, de torre o un enfriador de aire.
- En el comedor, cocina o contenedores adaptados como: oficina o habitaciones, se recomienda tener un ventilador de pie o un aire acondicionado portátil.
- En salas de reuniones, bodegas y oficinas de planta libre, los equipos recomendados son los ventiladores de techo o un sistema de aire acondicionado split.
Para calcular la cantidad de energía, sigue estos pasos:
1. Determina la potencia del sistema: se encuentra en la etiqueta del sistema. Esta potencia se mide en W (vatios).
2. Tiempo de funcionamiento: cuando enciendas el sistema de ventilación anota las horas por día o por semanas.
3. Calcula la energía utilizada: multiplica los vatios por el tiempo que anotaste de horas por día.
4. Calcula el costo de la energía: revisa tu factura y verifica el costo. Luego, multiplícalo por el consumo mensual. ¡Y listo!
Frigorías es una unidad de energía informal para medir la absorción de energía térmica.
Calcula 100 frigorías por cada m2 (metro cuadrado), aunque esta cantidad puede variar en función de las condiciones del espacio: aislamiento, exposición al sol y número de ventanas.
Se utiliza para producir corrientes de aire, es decir, mover el aire para refrescar. Un ventilador no produce frío, su efecto es conseguir que la sensación térmica del lugar descienda entre 3º (grados) y 5º. Se caracteriza por tener un consumo energético menor que otros sistemas.
La capacidad suele expresarse en m2 x minuto y está determinada por la longitud y la velocidad de las aspas de los ventiladores. Por ejemplo, una superficie grande necesita un ventilador con aspas de 90 a 132 cm (centímetros), esto permitirá mover más cantidad de aire, con un régimen menor de revoluciones, ya que más aspas chocarán más veces con el aire, produciendo un movimiento más continuo.
- Ventilador de pedestal: portátiles, de gran potencia, silenciosos e ideal para cualquier lugar, porque llega a todos los rincones.
- Ventilador de torre: su forma alargada hace que se pueda colocar en cualquier lugar. Hacen llegar el aire a todos los lugares. Su altura varía entre 38 cm (centímetros) y 95 cm.
- Ventilador de techo: se fija en el cielo del lugar, teniendo en cuenta que su altura debe ser superior a 2,3 m (metros). Algunos poseen un motor reversible, lo que permite distribuir hacia abajo o hacia arriba.
- Ventilador de mesa: su tamaño es reducido y su potencia es de media a baja. Ideales para muebles de escritorio o cualquier lugar de uso individual. Pueden tener entre 2 a 3 velocidades.
- Ventilador de pared: se pueden colgar de la pared o techo. No ocupan gran espacio. Son idóneos para oficinas, despachos y lugares donde haya muchas personas.
- Ventilador de piso: conocidos también como industriales, ya que se usan para espacios grandes de interior. Su potencia es elevada y posee un tamaño reducido.
Un aire acondicionado es un equipo que hace un tratamiento del aire ambiente para regular las condiciones, en cuanto a la temperatura.
Hay que preocuparse del nivel de silencio del equipo, sobre todo si lo instalarás en una habitación, lo ideal es que no supere los 24 dB (decibelios) y también considera la potencia que se mide BTU (unidad térmica británica), ya que eso determina la capacidad en m2 (metros cuadrados).
- Aire acondicionado portátil: tiene un diseño liviano y silencioso. Es ideal para habitaciones medianas, aunque se les debe ubicar cerca de una ventana por el tubo de expulsión de agua caliente.
- Aire acondicionado de pared (split): está compuesto de 2 partes, la primera, un evaporador en su interior y un condensador exterior. Entregan aire limpio y con bajos niveles de ruido. Algunos modelos incluyen purificadores de aire desodorizantes, deshumidificadores y bomba de calor para proporcionar un ambiente cálido.
Los enfriadores son equipos que funcionan con un recipiente lleno de agua helada o hielo, enfriando el aire que expulsan a través de un filtro húmedo, pueden descender la temperatura hasta 5º (grados), dependiendo del tamaño la habitación.
Como accesorios puede incluir filtro de aire con ionizador para purificar el aire, pantalla digital, control remoto, timer de 2 o más velocidades y ruedas de desplazamiento.
Un enfriador consume entre 1.000 y 2.500 watts y es un sistema de ventilación muy silencioso. No utiliza tubos o salidas hacia el exterior, porque no condensa el aire.
- Enfriadores de aire portátiles: se pueden mover con facilidad. Ideales para lugares pequeños.
- Enfriadores de ventana: deben instalarse en las ventanas. Son más efectivos en climas secos.
- Enfriadores de aire industriales: enfrían grandes almacenes y fábricas.
- Enfriadores inteligentes: permite controlar la temperatura y otras funciones a través de un control o el celular.
Los purificadores y humidificadores son muy útiles si vives en zonas con climas muy extremos o en ciudades contaminadas. Son ideales para alérgicos o personas con enfermedades respiratorias que necesiten controlar la humedad y purificación del ambiente.
- Purificadores: tienen ionizadores por lo que son ideales para mejorar la calidad del aire. Limpia el aire que entra de la ventana, a su vez elimina virus y bacterias. Algunos tienen un filtro de carbón activo con capacidad para la desodorización de los ambientes.
- Deshumidificadores: ayudan a bajar la humedad, lo que es una ventaja porque evita que se generen ácaros, moho y hongos. También hace que las prendas no absorban la humedad del ambiente.
- En los ventiladores respeta siempre una distancia mínima de unos 0,50 m (metros) hasta cualquier obstáculo lateral y de 2,10 m de las aspas al suelo.
- Para ayudar al ahorro de energía se aconseja fijar el termostato del aire acondicionado a 26° en verano y 2° en invierno. Bajar 1° de temperatura del aire acondicionado genera una subida del consumo eléctrico de hasta el 7%.
- Durante la noche y por la mañana, aprovecha de refrescar los rincones de tu hogar cuando la temperatura aún es baja.
- Para disminuir en el interior algunos grados de calor, instala toldos en las ventanas donde llegue el sol directo.
- Limpia los filtros de tus equipos de ventilación una vez al mes.
- Cuando no uses los equipos de ventilación, desenchúfalos. Cuando no estés en casa no los dejes prendidos, eso te hará gastar mucha electricidad.
¿Ya elegiste tu sistema de ventilación? Hazlo ya y mejora la calidad, el confort y la eficiencia del aire.
