Empieza por el color
Si vas a cambiar toda la sala, el color de la alfombra debes pensarlo muy bien, pues marcará la decoración del espacio. En tendencia están los colores neutros como el gris, beige o blanco. Si eres más bien de colores vivos, puedes elegir un tono como el vinotinto u otro. Lo ideal es que combine y esté en armonía con el resto de mobiliario, paredes y objetos decorativos.